Las pequeñas acciones cuentan y cuentan mucho”: Policía Segundo rescata a minino atorado entre alambres
Alejandro Daniel García Ferrel

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Una historia diferente y significativa se contó en la jornada de los guardianes del orden.
Un gato, con su pelaje gris con franjas negras y sus ojos grandes reflejando el miedo, se encontraba atrapado entre un enredo de alambres metálicos de una vivienda al sector sur de la ciudad.
Era una situación que, para muchos, podría haber pasado desapercibida. Sin embargo, para el oficial de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, esa pequeña criatura en apuros representaba más que una simple urgencia.
Con paciencia y valor, el comandante Policía Segundo Soto, quien cuenta con.año y preparación por años patrullando las calles de la ciudad, fue alertado por un vecino sobre la situación.
Al llegar al lugar, una vivienda en la avenida 8a del sector sur, la escena no era la más habitual en su rutina diaria: el gato, asustado y atorado no podía moverse debido a los alambres que lo envolvían en todas direcciones.
Con respecto hacia las solicitantes y con cautela y las manos protegidas por unos guantes, el.comandante Soto comenzó a deshacer cuidadosamente el nudo de alambres.
Para esto utilizó una escalera para llegar a la zona del alambre de púas colocado en la parte alta de un portón.
Cada movimiento era un riesgo, pues el gato, temeroso, reaccionaba nervioso ante el contacto.
Sin embargo, la tenacidad del oficial no flaqueó, y, con la precisión de quien sabe que cada acción cuenta, logró liberar al felino, que al principio parecía no entender que ya estaba libre.
La acción, pequeña pero significativa, no pasó desapercibida para los vecinos que hicieron llegar toda la información publicada y un video corto, pero donde se muestra el apoyo de los oficiales que buscan también la preservación de la vida.
A veces, los policías están tan ocupados con las grandes situaciones, pero este acto muestra que se interesan por los pequeños detalles de la vida”, expresó una vecina que presenció el rescate.
Una historia cotidiana, un acto sencillo, pero un recordatorio poderoso de que, en este mundo, cada pequeña acción realmente cuenta.
Alejandro Daniel García Ferrel