Gaza, nada ni nadie detiene la masacre
#Internacionales
*Asciende a 29.606 el número de palestinos asesinados por Israel en la Franja de Gaza y 69.737 heridos.
*Israel continúa cortándo el agua y los alimentos, incluida la leche de fórmula infantil, a dos millones de palestinos en la Franja de Gaza. Muchos están muriendo por desnutrición.
La estrategia de tierra arrasada que las fuerzas armadas de Israel aplican en la Franja de Gaza en su lucha contra Hamás ha sido una masacre continua que ya alcanza los 30.000 muertos y ha ido confinando hacia el sur a cerca de un millón y medio de personas hacinadas, heridas, carentes de agua y alimentos a la espera de un ataque aún más feroz anunciado por la tropas de ocupación.
Mientras que EE. UU. niega que se esté cometiendo genocidio y logra, mediante un veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, que se impida ordenar el cese del fuego necesario para dar ayuda humanitaria a las víctimas.
Los niños han sido de las mayores víctimas de la venganza de Israel, que espera continuar hacia la ciudad de Rafah, donde unos 1,4 millones de palestinos viven hacinados en refugios y tiendas de campaña.
Las imágenes de dolor se multiplican cada día junto a la desesperación en los hospitales colapsados o incluso objetivos también del ejército israelí.
Israel se prepara para una ofensiva en la ciudad de Rafah, última ciudad de la Franja de Gaza que no ha sido invadida por tropas terrestres y donde se refugian 1,4 millones de personas, de los 2,4 millones de habitantes de Gaza.
“Las consecuencias de un ataque a gran escala contra Rafah son realmente inimaginables”, declaró a la prensa Avril Benoit, directora ejecutiva de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Estados Unidos.
“Llevar a cabo una ofensiva militar allí lo convertiría en un cementerio”, afirmó Benoit en una rueda de prensa de MSF, Refugees International, Oxfam, Amnistía Internacional y otros grupos.
“La gente en el norte muere de hambre y nosotros aquí morimos por los bombardeos”, afirmó Aiman Abu Shamali, que perdió a su mujer y su hija en un bombardeo en Zawaida, en el centro de Gaza.
“¿Cuántos de nosotros debemos morir (…) para que cesen estos crímenes?”, preguntó Ahmad Moghrabi, un médico palestino de Jan Yunis. “¿Dónde está la humanidad?”.
